TUVE MIEDO*

Tuve miedo a la soledad

y al transitarla
disfruté de mi compañía.

Tuve miedo de no encontrar el Amor,

y lo experimenté hacia mi mismo.

Y desde ahí al otro y a la Vida.

Tuve miedo de fracasar,

y entendí que el verdadero fracaso

estaba en no arriesgarme.

Tuve miedo de las opiniones ajenas,

y vi que solo eran una excusa

para no ir hacia lo que quiero.

Tuve miedo al rechazo,

y cuando me acepté entendí

que en las relaciones damos y tomamos.

Y que a veces hay y otras no.

Tuve miedo al dolor

y al sostenerlo sentí la ternura

que nace al mecerme.

Tuve miedo a la verdad

y descubrí que la mentira

duele mas y,

me deja entre rejas.

Tuve miedo a la muerte

y aprendí a disfrutar en vida

de aquello que me rodea

y me toca el corazón.

Tuve miedo al odio,

al rencor, al resentimiento,

y al asumirlos en mi,

me descubrí más completo.

Tuve miedo al ridículo,

y me reí de mi mismo, 
desdramaticé.

Vi que soy como todos.

Tuve miedo a la vejez

y descubrí la sabiduría

de las experiencias con conciencia.

Tuve miedo  al pasado

y nació el presente 
como único lugar de Ser.

Tuve miedo a las diferencias,
a las amenazas vividas
como exclusión

y me enriquecí al sumarlas.

Tuve miedo al conflicto

y al bailar con él

lamí mis heridas 
mientras crecía.

Tuve miedo al enojo,

y entonces entendí

el cuidado de los límites.

Tuve miedo al miedo

y me encontré con que no saber

es vitamina para el Ser,

al invitarme a explorar y saber de mi.

Tuve miedo a la tristeza,

y experimenté la intimidad.

Ay la intimidad de estar en contacto…!

Tuve miedo al Amor,

así, con mayúsculas,

y descubrí que todos, si todos,

somos dignos de ser amados.

Y entonces, solo entonces

descansé en el Amor.

*Versión propia a partir de una inspiración de fuente anónima